Caín y Abel
Dios le dio a la primera pareja dos hijos, Caín y Abel, estos dos hermanos eran muy diferentes uno del otro. Abel fue pastor de ovejas, y Caín fue labrador de la tierra. Pasando el tiempo Caín tomó de la cosecha y presentó a Dios una ofrenda. Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas las mejores y le ofreció una ofrenda al Señor. El Señor aceptó la ofrenda de Abel pero no la de Caín. Esto hizo que Caín se sintiera deprimido y se enfureció al punto que su rostro reflejaba la intensidad de su furia. Un día Caín invitó a su hermano al campo; mientras estaban en el campo Caín se levantó contra su hermano Abel, y lo mató. Dios maldijo a Caín y le dijo que viviría errante y siempre sería un extranjero sobre la tierra. Entonces Dios puso una señal en Caín para evitar que cualquiera que lo encontrara lo matara. Caín mató a su hermano, no porque le hubiese hecho ningún mal sino porque sus obras eran malas y las de su hermano justas.
Genesis 4